sábado, 28 de agosto de 2010

El anticuario

" ALMONEDA ZACARÍAS.  ANTICUARIO " rezaba el letrero por encima de la puerta de entrada. Con el sonido de la vieja campanilla, se acercó a recibirnos el dueño de la tienda. Era un hombre de estatura por encima de la media. Andaría rondando los cincuenta. Vestía traje gris marengo con chaleco cruzado. Ni una arruga en el terno, como tampoco en su cuidada cara. Iba meticulosamente afeitado. La sonrisa más hermosa que recuerdo, dejaba entrever unos dientes como perlas cultivadas. _. Hola chicos, que os trae de nuevo por aquí? _. Hola. Queríamos saber si nos puedes ayudar con esto-dijo Fernando mostrando la alaja. _. Déjame ver.Umm. Parece interesante. ¿ Donde lo habéis encontrado ? Nos miramos unos a otros sin responder _. Creo que esta vez habéis hallado una buena pieza. Sus bellos ojos verdes se iluminaron al decir esto. Parece una sortija de pedida. Debía llevar engarzada alguna piedra preciosa. Es una pena que se haya desprendido. Imagino que queréis averiguar todo lo posible sobre la joya. Tendré que consultar algunos catálogos. Aunque parece pieza única es posible que tenga otras hermanas. Dadme una semana y os diré lo que averigüe. Mientras tanto aprovechad los pocos días de verano que quedan. Este Otoño amenaza ser muy lluvioso. Con la amabilidad que siempre le caracterizaba, nos acompañó a la salida... _. Aarón- llamó antes de que cruzáramos la calle. Me volví al oir mi nombre _. Quiero comentarte algo. Me acerqué para escucharle. _. Voy a necesitar ayuda los fines de semana. Me gustaría que trabajaras en mi tienda. Quiero alguien de confianza.-me propuso. Mi corazón se aceleró y me quedé callado sin poder reaccionar. Siempre había soñado con ese momento. _. Puedes empezar este Viernes si te parece bien. _. Sí, si puedo y si quiere usted mañana mismo.- balbuceé. _. No, no hace falta...

1 comentario:

Vaquero Jack dijo...

Hola Juan!

Me gusta que de una forma u otra parece que se etan interlazando tus relatos, eso los hace más interesantes.

Y repecto a la cita: "Al final, no nos acordaremos tanto de las palabras de nuestros enemigos, sino de los silencios de nuestros amigos." Creo que se refiere a que a veces es mejor quedarnos cayados antes de meter a un amigo en un lío.

Te mando un abrazo.